«No somos fachas, somos españoles» Este fue el grito expresivo y unánime más coreado en la manifestación del 8 de octubre de 2017 en Barcelona. Cerca de un millón de personas salió a las calles para mostrar el hartazgo de un paÃs y para decir lo evidente: que Cataluña es España y que el nacionalismo no tenÃa derecho a decidir por el resto de los españoles. Un libro en el que Emilia Landaluce analiza los motivos por los que tantos ciudadanos, de todas las ideologÃas, perdieron sus complejos y se unieron en una única voz sin miedo. La manifestación que late en las páginas de este libro no fue el resultado de la acción planificada de ningún partido polÃtico ni de ninguna plataforma cÃvica. Los asistentes querÃan transmitir a los no nacionalistas que vivÃan en Cataluña que, tras el golpe de Estado de Puigdemont y los suyos, no estaban solos. Que formaban parte de un paÃs, España, que tiene una voluntad, ciertamente empecinada, de vivir juntos todos los distintos. Un movimiento popular y espontáneo que se oponÃa a la fragmentación del paÃs y a la uniformidad esencialista del nacionalismo; a sus mentiras. Que ensalzaba lo que nos une y nos hace más fuertes. Que defendÃa, sin exaltaciones nostálgicas, las grandes aportaciones que España habÃa hecho al mundo. Que habÃa dejado atrás la Leyenda Negra que aún trata de resucitar el nacionalismo. Que no era Francoland sino una democracia moderna y homologable a cualquiera. Una verdadera toma de conciencia nacional narrada desde los testimonios personales. Una marea roja y amarilla que irrumpió como un rayo en la sociedad española.