Mini está ya en segundo. Su mejor amiga, Maxi va con ella a clase. Pero, por desgracia, también su enemiga, Cornelia. Cornelia no hace más que meterse con Mini, aunque ésta no sabe por qué. A Cornelia le gusta un niño de su clase que se llama Meier. Un día Alexander invita a todos a una fiesta de disfraces por su cumpleaños. Les dice que tienen que ir todos disfrazados, sin decir a nadie de qué. Luego, en la fiesta tienen que averiguar quién se esconde tras el disfraz. Cornelia, que es una chismosa, se entera de que Meier va a ir de mujer mora y se lo cuenta a todos. El día de la fiesta, Meier se pone enfermo y no puede ir. Pero sólo lo saben Maxi y Mini. Así que Mini se disfraza de mujer mora. Cornelia la confunde con Meier y le jura amistad eterna delante de todo el mundo. Cuando Mini se quita el antifaz, Cornelia se queda muy sorprendida. A partir de ese día, no se vuelve a meter con Mini. Y Mini se conforma con eso.
