Poco a poco, vemos que nuestros hábitos van cambiando. Nos estamos acostumbrando a reciclar la basura, a no desperdiciar el papel, a mirar la procedencia de los alimentos que consumimos; y en el caso de las nuevas generaciones, de forma aún más acusada. Pero todavía hay muchas cosas que podemos hacer y no sabemos cómo. Margaret Fenwick nos propone soluciones muy sencillas para aplicar en cada una de nuestras actividades diarias. Haciéndonos conscientes de pequeños gestos como el uso de la energía en nuestro hogar, nuestros hábitos alimenticios, los objetos que adquirimos y todo aquello con lo que disfrutamos; esta guía «ecochic» nos enseña a ejercer un efecto positivo en nuestra vida y en la de nuestro planeta.
