Carlos Domínguez Cidón;José Antonio Fidalgo Sánchez
Una información, en ocasiones excesiva, sobre los peligros de la obesidad y su influencia en los trastornos cardiovasculares, a la vez que una publicidad agobiante sobre el modelo de figura ideal han creado estados de opinión muy incidentes en los hábitos alimentarios y en los regímenes alimenticios.Consecuencia de todo esto es la aparición casi diaria de publicaciones muy diversas sobre regímenes y métodos de adelgazamiento, no siempre acertados y, en ocasiones, con claros errores conceptuales que pueden conducir a situaciones de relativo peligro.En general las palabras dieta, adelgazamiento, régimen... crean, en mayor o menor grado, una clara sensación de angustia y, en consecuencia, son rechazadas por quienes han de someterse a su presunta esclavitud.¿Por qué no ver las cosas en su aspecto positivo?¿Por qué no ofrecer un libro que nos ayude en nuestra dieta, no con motivación de sacrificio, sino con estímulo de placer? Se trata de no engordar, pero sin sufrir.No se citan recetas y fórmulas de guisos muy tradicionales (y que pueden consumirse perfectamente dentro de un orden calórico) sobradamente conocidas tanto en su elaboración como en su aporte energético. Se han buscado, por tanto, aquellas fórmulas novedosas, siempre interesantes y placenteras, para que usted coma y disfrute sin miedo a una obesidad que acecha.
